La flotación de espalda es la habilidad de supervivencia por excelencia. Un niño que puede flotar sobre su espalda es capaz de respirar y pedir ayuda. A medida que los alumnos progresan, esta habilidad también es necesaria. Si se cansan mientras están nadando, sabrán como girar para descansar y poder tomar aire. Los cuerpos de agua abiertos no tienen un “lado” al que llegar, por lo que esta es la mejor manera de garantizar la seguridad. ¡Siempre enseñamos a los alumnos a nadar completamente seguros en las clases de supervivencia antes de que puedan pasar a las clases de natación!